Escoger cuándo, dónde y cómo
Escoge un destino. Cuando la gente piensa “Quiero viajar”, suele tener algún destino en mente. ¿Cuál es el tuyo? Procura ser lo más específico posible. “Londres” es mucho más fácil de planificar que “Inglaterra”.
- Investiga en Internet y convérsalo con tus acompañantes de viaje. Internet es excelente para buscar fotos, bitácoras y videos de viaje publicados por personas reales que quieren compartir sus experiencias. Por ejemplo, antes de irte a Japón, haz una búsqueda rápida: obtendrás todo tipo de historias y consejos de gente que ha ido a Japón recientemente. Cada viaja te ofrece experiencias interconectadas de gente real para que puedas hacerte una mejor idea del lugar adonde quieres ir.
- Toma en cuenta las condiciones climáticas, los pros y los contras del lugar, los tipos de recreación (playas, cultura, compras) y las instalaciones (de transporte, para comer, etc.). ¿Qué ropa es la adecuada? ¿Cuán alejado de la civilización estarás? ¿Qué requiere tu destino?
Escoge cuándo quieres ir. Esto dependerá de una serie de cosas, pero principalmente de tu horario. ¿Cuánto tiempo te puedes tomar libre del trabajo? Además de tus limitaciones, toma en cuenta algunos factores más globales:
- ¿Quieres ir en temporada baja o cuando el turismo esté a tope? Con la temporada baja gozarás de descuentos, pero también muchos establecimientos podrían estar cerrados y haya poca disponibilidad.
- En cuanto al clima, ¿quieres lidiar con el invierno o la temporada de lluvias? ¿Quieres ir cuando esté caliente y bochornoso?
- Y por último, el precio de los pasajes: si vas a viajar, ¿cuál es la época más económica para hacerlo?
Planifica un itinerario aproximado. Planificar con demasiada antelación podría salirte por la culata, porque las vacaciones casi nunca salen como se planifican. Planifícate de modo que haya espontaneidad, pero ten presente los consejos de las guías de viaje. Marca los lugares para visitar y las cosas para hacer. ¿Cuántos días tienes? Deberás tener un horario general en mente, porque no querrás terminar demasiado cansado (o aburrido).
- Haz una lista. Anota los lugares que quieras visitar, incluidos los restaurantes, museos, centros comerciales y demás lugares de interés. Esto te ayudará a darte ideas y evitará que estés completamente perdido cuando llegues y no sepas qué hacer.
- También pon cómo te vas a movilizar. ¿Tu itinerario requiere que viajes en taxi?, ¿uses el metro?, ¿vayas a pie? Si vas a tomar el transporte público, asegúrate de saber cómo se hace sea cual sea el lugar a donde vayas.

Concretar tus planes
Haz tus reservaciones para los vuelos y los alojamientos. Una vez que estés completamente seguro a dónde y cuándo quieres ir, dónde te quieres alojar y cómo te quieres movilizar, haz las reservaciones. En el caso de los vuelos, reserva con dos meses de anticipación. Y no esperes hasta el último minuto para los hoteles, porque no querrás que estén repletos ni casi repletos (porque es ahí cuando los precios se van por las nubes).
-
Toma en cuenta un seguro de viajes. Si bien no deberás pagar las tarifas premium para algo que podría no suceder, aun así deberás conseguir un poco de protección en el caso de que no puedas viajar en las fechas reservadas de tus pasajes. En unas vacaciones promedio de una semana, las necesidades del seguro te costarán unos $75. No será demasiado dinero tomando en cuenta la seguridad que estarás adquiriendo.
- Solo tú sabes si eres de los que cambian de parecer muy a menudo, cambian de horarios a menudo o de los que se van aunque haya un huracán.
Si vas a viajar a otro país, asegúrate de que tus documentos estén en orden.Algunos países exigen tener visa para ingresar y salir del territorio. ¿Tu destino requiere una? De ser así, hazlo cuanto antes. Si surge algo y no la tienes, despídete de tu viaje. Si no tienes la visa, salvo los países que aceptan sobornos, te dirán que te regreses a tu país.
- Guarda tu pasaporte, documentos de viaje, visas y artículos similares en un bolsillo seguro. También te recomendamos sacar copias y tenerlas en un lugar seguro. Así reemplazarás más fácilmente algo que puedas perder.
Avisa a las partes correctas que te irás de viaje. Para empezar, avísale a un amigo o familiar que te irás. Si es posible, dales un número telefónico o dirección de contacto. Si pasa algo malo, podrán decírtelo. Y si a ti te pasa algo malo, podrán encargarse del asunto en casa.
- Si puedes, pon una notificación de vacaciones en tu correo electrónico y recuerda configurar tu máquina contestadora. Esos mensajes tendrán que esperar a tu regreso.
Calcular la logística
Evalúa los costos. ¿Vas a bañarte en champaña en una bañera clásica de un hotel cinco estrellas? ¿O vas a vivir sin comodidades en hostels con una rebanada de pan en el bolsillo? Gran parte del costo de unas vacaciones depende de lo que decidas gastar. Tómate un par de horas para calcular cuánto costará el viaje a ti y a tus compañeros. Este aproximado tendrá que incluir los pasajes o los gastos de gasolina.
- Siempre redondea a más y no a menos. Siempre habrá gastos que no podrás prever o cosas que quieras que no tomes en cuenta.
- Si el viaje cuesta más de lo que estás dispuesto a gastar, haz los recortes en donde puedas. Si al final tienes que reducir los días de viaje, hazlo.
Haz un presupuesto. Supongamos que calculas que el viaje costará $1500, incluido el pasaje de avión. Faltan 6 meses, así que tendrás que ahorrar $250 por mes durante los próximos 6 meses para que puedas cubrir los gastos del viaje. A continuación te presentaremos unas cuantas ideas para que sepas en dónde empezar a ahorrar:
- Come más en casa. Los restaurantes son geniales, pero son costosos. Si cocinas en casa, ahorrarás dinero no solo porque es más económico, sino porque la comida podrá durar días.
- Deja de darte lujos durante un tiempo. ¿Ese último trago el sábado por la noche? Queda fuera. ¿Una película la próxima semana? No. ¿Televisión por cable? ¿Quién lo necesita cuando hay Netflix? Observa las pequeñeces que son divertidas, pero que puedas obviar.
Mientras estés ahorrando, investiga. Si planificas con anticipación, podrás ahorrar buscando ofertas, ya sean de vuelos o de alojamiento. Busca en línea las cosas que podrás hacer y consejos de viajes para ir a tu destino y a sus alrededores. Cuando aprendas a hacerlo, sabrás qué buscar cuando busques ofertas, tales como pases para museos, descuentos de hotel, ofertas de transporte, etc. Y cuando las encuentres, tómalas.
- Se dice que deberás reservar un pasaje de avión con dos meses de anticipación para que obtengas las mejores ofertas. Es en ese periodo cuando las aerolíneas empiezan a hacer descuentos para vender pasajes y no han inflado los precios por ser de último minuto.
- Si vas a algún país en donde se habla otro idioma, tómate el tiempo para repasar lo básico. Estarás contento de haberlo hecho y también alegrará a la gente con la que interactúes.

Ultimar los detalles
-
Compra todo lo que necesites. Compra rollos o ten baterías de una cámara digital a la mano. ¿Tienes el adaptador correcto del lugar a donde vas? ¿Tienes la ropa para el clima que hay? ¿Una guía de viajes? ¿Un libro del idioma? ¿Qué cosa hará que tu viaje marche sobre ruedas?
- ¿Vas a viajar en auto? Asegúrate de comprar muchos bocadillos, agua y cosas para hacer. Los audiolibros en CD acerca de viajes en auto o de tu destino específico será excelente para prepararte anímicamente. Considera “On the Road”, “Lost in My Own Backyard”, “A Walk Through the Woods” o “Washington Schlepped Here”, entre otros. Tener buena música también será obligatorio.
Empaca ligero. Nadie jamás dijo mientras estaba de vacaciones “Me alegra haber empacado casi todo mi armario”. Deja espacio para las compras y los suvenires. Además, viajar con demasiado equipaje restringe el movimiento y causa molestias, porque estarás moviéndote mucho y solo te resultará engorroso. Empaca solo aquello que necesites.
- Limítate a empacar prendas básicas y unos dos pares de zapatos; en realidad será lo único que necesitarás en cuanto a ropa sea cual sea la duración del viaje. Una cuantas camisetas básicas, unos cuantos pantalones básicos, shorts o una falda serán suficientes. Podrás mezclarlos y combinarlos según lo necesites.
- Cuando hagas la maleta, enrolla la ropa. Esto te ahorrará muchísimo espacio y además podrás comprar esa antorcha de bambú que se ve auténtica cuando te dé la gana.
¡Ve! ¿Itinerario? Listo. ¿Pasaporte y documentos? Listo. ¿Reservaciones para casi todo? Listo. Lo único que te faltará es la parte más fácil: ir y divertirte. Será hora de relajarse.
- No caigas en la tentación de llevar los problemas del trabajo o de la casa contigo, sino toda tu planificación se irá al agua, porque sentirás que mentalmente todavía estás en casa. Deja la laptop y el celular apagados: ahora será hora de explorar e ir tras la aventura.
